El lunes 3 de marzo, un sismo de magnitud 5 sacudió Chilca, al sur de Lima, recordándonos lo vulnerable que es el Perú ante fenómenos naturales. A pesar de estar en una zona con alta actividad sísmica, el acceso a seguros contra sismos y desastres naturales sigue siendo bajo. Según la Asociación Peruana de Empresas de Seguros (APESEG), solo el 3,3% de los hogares peruanos cuenta con una póliza para protegerse de estos eventos. Este porcentaje equivale a unas 300.000 viviendas de los 8 millones que existen en el país, un número alarmante si se considera la frecuencia de los sismos y otros desastres como huaycos e inundaciones .
La falta de cultura aseguradora en Perú
Aunque Perú es un país con una historia sísmica significativa, la cultura del seguro sigue siendo muy baja. A pesar de haber experimentado desastres como el terremoto de Pisco en 2007, que dejaron millas de víctimas y grandes pérdidas materiales, aún son pocos los que se aseguran ante estos eventos. La sensación de “silencio sísmico” durante más de una década ha hecho que muchas personas olviden los riesgos a los que están expuestos, lo que podría tener consecuencias graves cuando se presente un nuevo terremoto.
Prepararse para un sismo: acciones clave
Ante esta situación, APESEG recomienda que todos los hogares adopten medidas preventivas. Tener un plan de emergencia familiar y realizar simulacros periódicos son pasos fundamentales para saber cómo reaccionar durante un sismo. También es esencial tener una mochila de emergencia con agua, alimentos no perecibles y linternas.
Dentro de la casa, es importante identificar áreas seguras, como columnas estructurales o zonas alejadas de ventanas y objetos pesados. Contar con un seguro de hogar es otra medida clave que puede marcar la diferencia al momento de enfrentar los daños materiales que deja un sismo.
Acciones durante y después del sismo
Cuando ocurre un sismo, lo más importante es mantener la calma. Si te encuentras en un edificio, debes evitar el uso del ascensor y buscar las escaleras. En espacios abiertos, alejarse de cables eléctricos, postes o árboles es vital. Tras el temblor, no regresar a casa hasta que se confirme que la estructura no está comprometida. Mantener la comunicación con los seres queridos a través de mensajes de texto también es esencial para evitar el colapso de las líneas telefónicas.
El seguro como herramienta esencial
Un seguro de hogar puede ser un salvavidas en estos casos. En caso de sufrir daños, es necesario contactar a la aseguradora lo antes posible y documentar los daños con fotos o videos. APESEG destaca que la cobertura de estos seguros varía, pero en muchos casos, la aseguradora cubre los costos de reparación o reconstrucción de la propiedad.
La falta de preparación ante desastres naturales es una realidad preocupante en el Perú. Solo un pequeño porcentaje de hogares tiene seguro contra sismos , lo que deja a muchas familias expuestas. Es fundamental informarse y actuar para protegerse de los inevitables riesgos sísmicos que enfrentamos a diario.
Con información: infobae