Las inundaciones en Texas que dejaron un saldo trágico de 24 muertos y más de 20 niñas desaparecidas de un campamento de verano en la región de Texas Hill Country. El nivel del río Guadalupe se elevó de forma repentina y arrasó con todo a su paso.
Desaparecieron 23 niñas en un campamento de verano
El hecho más alarmante se registró en el Campamento Mystic, donde había unas 750 menores. Según las autoridades, al menos 23 niñas siguen sin aparecer. El agua creció tan rápido que arrastró carpas, vehículos y personas durante la madrugada. La comunidad vive horas de angustia mientras familiares publican fotos y pedidos de ayuda en redes sociales.
Los equipos de rescate desplegaron 14 helicópteros, drones y embarcaciones para evacuar a los afectados. Hasta el momento, se logró rescatar a 237 personas, entre ellas 167 mediante operaciones aéreas. “Estamos haciendo todo lo posible para encontrar a todos los que faltan”, aseguraron voceros del operativo.
Los rescatistas trabajan sin descanso en Texas Hill Country
La magnitud del desastre quedó reflejada en los relatos de los sobrevivientes. Erin Burgess, vecina de Ingram, contó que se salvó junto a su hijo de 19 años al aferrarse a un árbol durante una hora. Su pareja y su perro fueron arrastrados por la corriente, pero lograron reencontrarse.
Otro testimonio estremecedor de las inundaciones fue el de Barry Adelman, de 54 años, quien se refugió en el ático de su casa con su abuela de 94 y su nieto de 9. “Tenía que mirar a mi nieto y decirle que todo iba a estar bien, aunque por dentro estaba muerto de miedo”, relató.
Un medidor del río Guadalupe registró un aumento de 6,7 metros en dos horas, antes de colapsar al alcanzar los 9 metros. “El agua se mueve tan rápido que no te das cuenta de lo mala que es hasta que la tenés encima”, advirtió el meteorólogo Bob Fogarty.
El juez Rob Kelly, máxima autoridad del condado, reconoció que no hay sistema de alerta. “Nadie sabía que venía una inundación así”, afirmó. La falta de previsión y los sistemas inadecuados agravaron las consecuencias del fenómeno.
Austin Dickson, director de la Fundación Comunitaria de Texas Hill Country, explicó que el suelo de la zona no absorbe el agua y que las colinas hacen que fluya con fuerza hacia abajo. La economía local, centrada en el turismo fluvial y los campamentos, sufrió un golpe inesperado.
En Nueva Jersey, las inundaciones y el mal clima también dejaron víctimas. Tres personas murieron, entre ellas dos hombres aplastados por un árbol. Se suspendieron las celebraciones del 4 de julio en varias ciudades.
Con información de: https://www.infobae.com/