El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró que no tiene intenciones de presionar a Israel para que frene sus ataques aéreos contra Irán, al considerar que Tel Aviv mantiene una ventaja clara en el terreno militar. En medio de una creciente tensión en Oriente Medio, el mandatario destacó: “Israel lo está haciendo bien en términos de guerra”, y dejó abierta la posibilidad de una participación directa de Estados Unidos si no hay avances diplomáticos en las próximas dos semanas.
Trump rechazó la mediación europea
Durante un breve contacto con periodistas en Nueva Jersey, adonde llegó para participar de una recaudación de fondos, Donald Trump minimizó los esfuerzos europeos para calmar el conflicto. “Irán no quiere hablar con Europa. Quiere hablar con nosotros”, dijo, en relación a las negociaciones que se desarrollan en Ginebra entre diplomáticos europeos e iraníes. Para el mandatario estadounidense, ese tipo de gestiones no tienen peso real y no modifican el curso de la situación.
“Creo que es muy difícil hacer esa petición ahora mismo si alguien está ganando”, expresó, al descartar por completo la posibilidad de presionar a Israel para frenar los bombardeos. Y agregó: “Irán lo está haciendo menos bien, y es un poco difícil conseguir que alguien se detenga”.
🚨🗣El presidente Donald Trump descartó que pueda evitar que Israel cese ataques contra Irán, pues "si alguien está ganando, es un poco más difícil hacerlo que si alguien está perdiendo", e indicó que continúan a la espera de una salida al conflicto. #DonaldTrump #Israel #Irán… pic.twitter.com/XQdP2G33Zw
— Canal Antigua (@CanalAntigua) June 21, 2025
Estados Unidos decidirá en dos semanas si interviene
Trump fue más allá al fijar un plazo de “dos semanas como máximo” para definir si Estados Unidos tendrá un rol más activo en el conflicto. “Estoy dando un plazo. La decisión puede llegar antes si no hay ningún progreso hacia el desmantelamiento del programa nuclear iraní”, anticipó. Según fuentes de la Casa Blanca, las conversaciones entre Washington y Teherán siguen abiertas, pero sin señales claras de avance.
En paralelo, el canciller iraní, Abbas Araqchi, había pedido desde Ginebra que Estados Unidos intercediera ante Israel para que detuviera los ataques como condición para retomar el diálogo nuclear. Esa posibilidad fue descartada por Trump: “Si alguien va ganando, es más difícil pedirle que se detenga”, insistió.
El presidente también cuestionó a su directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, por señalar que Irán no representa una amenaza nuclear concreta. “Se equivoca al decir que no hay pruebas. En Irak no había armas de destrucción masiva, pero esta vez es distinto”, afirmó.
Israel lanzó bombardeos en la capital iraní
Desde el 13 de junio, Israel intensificó sus ataques sobre instalaciones nucleares y barrios residenciales de Teherán, en lo que funcionarios israelíes describen como una estrategia para frenar los avances nucleares iraníes antes de la nueva ronda de negociaciones prevista en Mascate, Omán. Trump reconoció que la capacidad militar israelí es limitada para destruir todo el programa nuclear iraní, aunque destacó su efectividad hasta ahora.
Trump volvió a cuestionar el uso civil del uranio
En el tramo final de su declaración, Donald Trump volvió a poner en duda el argumento de Irán sobre el uso pacífico de su tecnología nuclear. “Están sentados sobre uno de los mayores cúmulos de petróleo del mundo. No entiendo por qué necesitan eso para usos civiles”, dijo. Según el mandatario, el objetivo de su gobierno sigue siendo que Irán abandone sus pretensiones nucleares y cese el enriquecimiento de uranio.
Con información de: infobae