El presidente Donald Trump advirtió que, si Vladimir Putin no acepta un alto el fuego en Ucrania, Estados Unidos responderá con sanciones severas. El mandatario dijo que no se trata de un conflicto militar directo, sino de una posible guerra económica que golpearía de lleno a Rusia.
Reacciones en Ucrania y en Europa
El mensaje fue seguido con atención en Kiev y en las principales capitales europeas. Para Ucrania, la advertencia de Washington se traduce en una señal de apoyo político, aunque también en incertidumbre. El gobierno de Volodymyr Zelensky espera que las sanciones puedan frenar la ofensiva rusa, pero duda de la voluntad del Kremlin de negociar.
Trump advirtió sobre una “guerra económica” con Rusia si Vladimir Putin no accede a un alto el fuego en Ucrania
— CENTRO Digital (@radiocentroec) August 27, 2025
El mandatario estadounidense dijo que contempla medidas severas si Moscú insiste en sus agresiones. “Es muy serio lo que tengo en mente, si llega a ser necesario”,…
En Europa, los aliados de Estados Unidos evalúan los efectos de una escalada económica. Bruselas ha respaldado varias rondas de sanciones desde 2022 y mantiene contactos estrechos con la Casa Blanca para coordinar medidas adicionales. Diplomáticos europeos coinciden en que cualquier decisión de Moscú repercutirá en el mercado energético regional.
El vicepresidente JD Vance insistió en que Washington no descarta nuevas sanciones. “Las evaluaremos caso por caso”, señaló. Esta posición deja abierta la puerta a distintos escenarios, desde un endurecimiento inmediato hasta un enfoque más gradual.
Estrategia de la Casa Blanca y el rol del Congreso
La política de Donald Trump combina presión y posibles incentivos. Además de sanciones y aranceles, su administración analiza permitir a empresas estadounidenses participar en proyectos energéticos rusos si Putin muestra voluntad de avanzar en la negociación. Esa doble vía busca obligar al Kremlin a moverse hacia un acuerdo.
El Congreso también juega un papel clave. El senador Lindsey Graham impulsa la Ley de Sanciones a Rusia de 2025, que contempla aranceles de hasta 500% a países que compren energía rusa. La iniciativa ya tiene apoyo bipartidista y podría convertirse en una herramienta central de presión económica.
Donald Trump recordó que en agosto mantuvo un encuentro con Putin en Alaska y que aún considera posible una reunión con Zelensky, siempre que haya señales de avance. “Vamos a saber en dos semanas si existe margen para negociar”, afirmó.
La Casa Blanca sostiene que Ucrania seguirá recibiendo apoyo logístico y tecnológico, pero descarta su ingreso a la OTAN. Según Washington, esa opción no es viable dentro de un eventual acuerdo de paz.
Mientras tanto, Moscú mantiene una postura firme. El Kremlin rechaza las condiciones que exige Occidente y apuesta a resistir las sanciones. Para Estados Unidos y sus aliados, la vulnerabilidad económica de Rusia es la clave para presionar a Putin y acercar la posibilidad de un alto el fuego en Ucrania.
Con información de: reuters