Un total de 300 inmigrantes indocumentados fueron detenidos este sábado en el sector de Friusa, Punta Cana, como parte de un operativo coordinado por la Dirección General de Migración. Las acciones, que forman parte de un plan nacional, buscan reforzar el control en zonas turísticas con alta presencia de extranjeros en condición irregular. Las autoridades afirmaron que se aplicará la Ley General de Migración con respeto a los derechos humanos.
El operativopara reclutar a los indocumentados fue encabezado por el vicealmirante Luis Rafael Lee Ballester. Contó con el apoyo de la Policía Nacional, el Ejército y miembros de la comunidad. La intervención abarcó también zonas como Mata Mosquito, Villa Playwood y Haití Chiquito, donde en días anteriores ya se habían arrestado 236 personas sin documentación válida.
Comunidad respalda operativos tras incidentes en marcha patriótica
Los operativos comenzaron luego de la «Marcha Patriótica» del pasado domingo, convocada por la Antigua Orden Dominicana. La manifestación terminó en enfrentamientos entre manifestantes y agentes policiales. Desde entonces, las autoridades han mantenido una vigilancia reforzada en toda el área de Friusa.
El Gobierno aseguró que los 300 detenidos serán sometidos a un proceso de verificación y posterior deportación, según su estatus migratorio. También reiteró que estas acciones se desarrollan bajo el marco legal vigente y con especial atención al respeto de los derechos humanos.
Operativos seguirán en zonas de alta presencia migratoria
El Ejecutivo indicó que estos operativos no se limitarán a Punta Cana. Otras zonas del país con altos niveles de migración irregular serán intervenidas con el mismo protocolo. El objetivo es garantizar la seguridad ciudadana, mantener el orden público y aplicar sin excepción la legislación migratoria.
“Estamos actuando con firmeza, pero también con respeto. El país tiene que mantener el control de sus fronteras y eso se está haciendo”, expresó un vocero de Migración. Las autoridades destacaron además el respaldo que han recibido por parte de residentes locales, quienes consideran las medidas necesarias.En la región Este, donde se concentra buena parte del turismo, la vigilancia seguirá activa. Se busca proteger tanto a los visitantes como a las comunidades. La Ley de Migración seguirá siendo el instrumento legal que rige todas las intervenciones, bajo supervisión directa de las autoridades correspondientes.
Con información de: 7dias