En Colombia, más de 28.000 accidentes escolares se registraron durante 2024 en colegios públicos de Bogotá, según cifras de la Secretaría de Educación. La mayoría fueron caídas desde alturas, golpes con objetos contundentes y otras situaciones que pusieron en riesgo la integridad de los alumnos. Frente a esto, cada vez más instituciones comenzaron a contratar seguros escolares para proteger tanto a estudiantes como a docentes.
En Colombia durante 2024, se reportaron más de 28.000 accidentes en colegios públicos de Bogotá, según cifras de la Secretaría de Educación. Entre los incidentes más comunes están las caídas desde grandes alturas y golpes con objetos contundentes https://t.co/PC5clQA73w
— Diario La República (@larepublica_co) July 21, 2025
La preocupación por el aumento de estos incidentes llevó a que los directivos incluyeran la contratación de seguros dentro de la planificación institucional. Muchas escuelas, especialmente públicas, no cuentan con la infraestructura adecuada para prevenir este tipo de riesgos. En ese contexto, la cobertura médica ante imprevistos se volvió una necesidad urgente.
Primeros seguros escolares ganan espacio en Colombia
Una de las iniciativas más destacadas es la de Seguros Mundial, que presentó el programa “Protegemos tus pasos”. La póliza ofrece cobertura las 24 horas del día, sin necesidad de exámenes médicos, y acceso a una red hospitalaria en todo el país. Está dirigida tanto a colegios públicos como privados.
“La seguridad escolar no solo tiene que ver con lo académico. También implica proteger físicamente a los alumnos y al personal. Un accidente puede tener un impacto económico muy alto para cualquier familia”, explicó Juan Enrique Bustamante, presidente de la aseguradora. Según indicó, la intención es brindar un respaldo integral a la comunidad educativa.
Coberturas incluyen atención médica y apoyo psicológico
Además de la atención médica tradicional, el seguro incluye servicios de telemedicina, odontología, ambulancia aérea, y orientación médica familiar. También contempla reembolsos por daños a bienes ajenos e incluso apoyo psicológico, clave para tratar traumas posteriores a accidentes graves.
Hasta el momento, el programa alcanzó a más de 800.000 estudiantes en 1.900 instituciones educativas del país. En algunos casos, los seguros son costeados por las escuelas; en otros, los padres abonan una cuota mensual reducida.
Para muchas familias, esta alternativa representa tranquilidad. “Nadie quiere que su hijo se lastime, pero saber que va a estar bien atendido cambia todo”, opinó Ángela Rodríguez, madre de un alumno de primaria en Bogotá.
el aumento de los accidentes escolares en Colombia, el rol de las aseguradoras comenzó a cobrar mayor protagonismo dentro del sistema educativo. La contratación de seguros para estudiantes ya no es una opción lejana, sino una herramienta concreta que responde a una realidad cada vez más presente.
Con información de: msn.com