La Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO) advirtió que Estados Unidos podría sumar 10 millones de personas sin seguro médico para 2034, si prospera una reforma federal que recorta fondos al sistema de salud. El impacto se daría por cambios en subsidios clave y en el financiamiento de Medicaid, todo esto ocurre bajo el marco del recorte federal.
El informe analizó los efectos de la llamada One Big Beautiful Bill Act, una iniciativa que prevé un recorte cercano a un billón de dólares en gasto federal destinado a los mercados de seguros de salud y a los programas estatales de Medicaid. Según la CBO, esa reducción tendría consecuencias directas sobre la cobertura y los costos.
Suba de primas y pérdida de subsidios
Uno de los cambios más relevantes es el posible fin de la ampliación del crédito fiscal para primas, vigente desde 2014 y reforzado en los últimos años. Este beneficio permitió que millones de personas accedieran a planes más económicos en los mercados de seguros, pero su vigencia expira a fines de 2025.
Si el Congreso no extiende esos créditos, la CBO prevé una fuerte caída en la inscripción a planes subsidiados. Además, estima que las primas de referencia subirían 4,3% en 2026 y hasta 7,9% anual entre 2026 y 2034 si el subsidio desaparece de forma permanente.
El Urban Institute calculó que, en 2025, la prima anual promedio con subsidio sería de 460 dólares. Sin ese apoyo, el costo superaría los 1.080 dólares, con un aumento superior al 130%, lo que dejaría a muchos hogares fuera del sistema.

Más gastos médicos y riesgo de deuda
Actualmente, más de 24 millones de personas tienen cobertura a través del Mercado de Seguros, y el 92% recibe algún tipo de crédito fiscal, según la Kaiser Family Foundation. Sin ese respaldo, muchos optarían por abandonar el seguro por falta de recursos.
La falta de cobertura del seguro médico también eleva los gastos directos. Estudios recientes indican que una consulta médica puede costar entre 150 y 300 dólares, una radiografía superar los 1.000, y los procedimientos complejos alcanzar varios miles.
La KFF advirtió que casi la mitad de los adultos no podría afrontar una factura médica inesperada de 500 dólares. Además, más del 36% de los hogares arrastra deudas médicas, que en muchos casos terminan en procesos de bancarrota.
Especialistas señalaron que perder el seguro no solo limita el acceso a la atención, sino que expone a millones de personas a un mayor riesgo financiero, en un sistema donde la salud sigue siendo una de las principales causas de endeudamiento en Estados Unidos.
Con información de: heldiariony




